Esta es una iniciativa que muchos emprendedore han adoptado para establecer sus ideas de negocios, no solo se trata de una moda ó de un concepto industrial y vintage, se trata del aprovechamiento de estos contenedores que cumplieron su vida útil como unidades de almacenaje y transporte para las navieras de carga, su estructura es totalmente funcional y pueden ser aprovechados en ves de ser fundidos ó desechados, es una segunda oportunidad para estos contenedores que viajaron alrededor del mundo, llevando mercancías en su interior de un lugar a otro, abriendo paso al progreso comercial a nivel mundial; es grato ver la forma en que estos emprendedores con sus ideas dan nuevamente vida a estos viejos fierros, los vemos de distintos colores, diseños y texturas, pero su esencia se conserva, todos al verlo sabemos que es un container; hoy encontramos plazoletas de comidas, restaurantes y puestos estacionarios que ofrecen un sin fin de delicias gastronómicas, sus años de almacenar mercancías, terminaron, ahora están destinados a conservar en su interior los secretos culinarios de expertos y apasionados por la comida, hoy acogen a comensales que se alojan en su interior para deleitar sus paladares con alguna delicia, departiendo un grato momento en un espacio acogedor, que extrañamente nos resulta muy familiar.
Es curioso pensar que esta iniciativa tuvo sus orígenes durante la segunda guerra mundial, donde se aprovecharon los contenedores de la época para montar campamentos temporales, de este modo las tropas se reunían dentro de estos contenedores para planear estrategias, departir, consumir sus alimentos y en ocaciones dormir. Han pasado los años, y la herencia de aprovechamiento de estos contenedores continua vigente, todo gracias a la iniciativa de aquellos emprendedores que ven en estos trozos de hierro una oportunidad de negocio.